Entre la naturaleza y la cultura, entre la filosofía y la antropología, entre la duda.
LOS DUEÑOS DEL CUERPO HUMANO
Para las ciencias médicas es una serie de organismos para sanar,
para la economía es una fuerza de trabajo para emplear,
para la religión es un trozo de carne para reprimir, castigar y redimir,
para los manipuladores es un ser a quien “le está prohibido olvidar”.
Para los pueblos es un habitante anónimo,
para el padrón electoral es uno más en la lista ciudadana,
para el registro civil es un número de cédula,
para los selfies es solo una imagen repetida.
Para la educación es un carente al que debe alfabetizar,
para el mercado es un cliente al que debe satisfacer,
para la democracia es un voto obligatorio y que debe sufragar,
para el mercado de trabajo es un operario eficiente y productivo.
Para los tatuadores es un espacio para dibujar,
para los jóvenes es un motivo para disfrutar,
para las anoréxicas es un obstáculo para ser feliz,
para los deportistas es una máquina para entrenar.
Para la sensualidad es una oportunidad para disfrutar,
para el equipo deportivo es un hincha que debe pagar y aplaudir,
para los vendedores es quien debe comprar, comprar y consumir,
para los predicadores es un infeliz al que deben la promesa de la salvar.
Para los intolerantes es a quien deben desaparecer,
para los militares es un mayor de edad a quien deben enlistar,
para los revolucionarios es un militante a quien deben adoctrinar,
para los medios masivos de comunicación es a quien deben estupidizar.
Para la moda es una unidad donde replicar,
para los supermercados, es un cliente debe consumir,
para las operadoras es un número de teléfono que debe recargar,
para el ser humano, es otro miembro de la especie.
Para el religioso, es miembro de su iglesia,
para un psicólogo, es ser desadaptado al que se debe tranquilizar,
para la administración de su trabajo es un nombre en el rol de pagos,
para sí mismo es un extraño, al que no le interesa conocer.
Jorge Mora Varela