31 de diciembre

31 de diciembre

Como cada 31 de diciembre,

había que salir a la superficie,

respirar profundo,

mirar en lontananza,

contemplar de soslayo las huellas por dónde habíamos llegado,

reparar en los que seguimos juntos,

pensar en los que se han ido lejos,

tocar el hombro de los que regresaron y

hacer silencio por los que se quedaron.

jano 03

Buscar un espejo de agua para mirar las cicatrices,

sentarnos en silencio,

afilar nuestras armas,

darle un respiro al cuerpo y

dejarnos acariciar por el aire fresco.

 

Mirar de frente al dios de las dos caras,

el de la vida y de la muerte,

ese que puede ver el pasado y el futuro al mismo tiempo,

pasar por su lado sin temor, sin bajar la mirada,

para entrar otra vez al torrente violento y misterioso que es la vida,

y aspirar salir a la superficie el siguiente 31 de diciembre.

 

Para otra vez, respirar profundo,

mirar otra vez en lontananza,

contemplar de soslayo las huellas por dónde habíamos llegado,

reparar en los que seguimos juntos,

pensar en los que se han ido lejos,

tocar el hombro de los que regresaron y

hacer silencio por los que se quedaron,

así será, hasta que sea yo uno de los que se quedaron.

 

Jorge Mora Varela

 

Imagen de Jano tomada de: cronistasoficiales