La Piedra Chugchurrumi

 

La Piedra Chugchurrumi.

Parroquia: Juan Montalvo

Un cierto día, a las doce de la noche pasé junto a la piedra Chugchurrumi dirigiéndome a tomar el turno del agua de riego, cuando escucho una extraña conversación de la cual no entendí nada, pensé que se trataba de una pareja de enamorados, me quise esconder para no ser visto arrimándome a la piedra y tapándome con unas matas de chilca. Para mi sorpresa, las voces salían de dentro de la piedra; yo, asustado, con la piel de gallina, y sin poder pronunciar palabra, me alejé del lugar lo más rápido que dieron mis piernas.

Al día siguiente, al pasar por el mismo lugar, escuché repicar campanas, sonidos que salían de la misma piedra.

Conversé a mis amigos y vecinos de lo sucedido, pero a nadie se mostró sor-prendido porque también habían escuchado lo mismo y afirmaban que es un lugar encantado.

Que de la piedra salen extraños animales, bultos como si fueran fantasmas, que se abre una puerta y que es el sitio propicio para hacer pactos con el Diablo.

La existencia de esta piedra en Juan Montalvo está cargada de malos augurio', Viven espíritus malignos: se presentan a ciertas personas quienes enferman y aunque después se sanan nunca reponen completamente.

Como sea, aún seguimos pasando por este sitio de encanto, con la certeza de que no es a nosotros a quien los malos espíritus están buscando.

Proviene de las palabras quichuas Chugchu=pecho rumi=piedra

 

Tomado del Libro “MEMORIAS DE MIRA”
Autor: Rosa Cecilia Ramírez Muñoz