Carapaz es bien “jurguillas”

 

El flamante monarca del Giro de Italia siempre se muestra callado y por demás concentrado; pero una vez que se baja de su bici o entra en confianza, se torna diferente.

 

De este testimonio da fe Cristina, su hermana, quien asegura que “Carapaz es bien jurguillas”. Mientras entra al archivo de su memoria, sonríe y se toma unos segundos para narrar unas de las tantas travesuras que el “chiquilín” solía hacer en casa.

A lo mejor, el “escarabajo” carchense tenía unos 5 o 6 años cuando con Cristina decidieron jugar a los “pintores”. Ni corto ni perezoso, “Richie” tomó el griffin negro y dio la primera mano a la pared del dormitorio de sus padres… Cristina se encargaría de dar el retoque.

El improvisado trabajo no cumplió su feliz término. En cuanto llegó Antonio Carapaz y Ana Montenegro se quedaron mutis. “No nos hicieron nada. Solo nos quedaron viendo no más”, reseña Cristina. Llegó el momento entonces, de “contratar la obra” y los pequeños inquietos junto a sus padres, recuperaron la pared con pintura de “adeveras”.

 

Jurguillas: Niño inquieto, juguetón, travieso, mono, fastidioso

(Tomado del libro Lenguaje Popular Carchense, de Amilcar Tapia Tamayo).

 

Por. Milton Froilán Jimenez