Ausencia
Eduardo
Amadísimo hermano,
abonador generoso de mi pueblo,
enriquecedor de la vida, a través de la palabra,
libre creador del pensamiento noble y bondadoso.
No bastaba, dejar caer unas cuantas lágrimas,
para potenciar la savia de la tierra. ¡No bastaba!,
Tenías que ser parte de la tierra misma,
para que brotara vigorosa la belleza hecha palabra.
Hoy más que nunca, tu pensamiento vive en el verbo,
hoy más que nunca, se hacen respetar tus decisiones,
hoy más que nunca, te tenemos cerca,
hoy más que nunca te amamos hermano nuestro.
A Gabita
Tierno ángel de la guarda,
nuestra dulce compañera
Por: Jorge Mora Varela