No desconozco el derecho de los padres de familia de los estudiantes detenidos a defender a sus hijos, pero NO estoy de acuerdo con la manera de hacerlo, han “PEDIDO PERDÓN”, han implorado de rodillas y se han humillado.
LAS PROTESTAS ESTUDIANTILES, EL GOBIERNO Y LOS PADRES DE FAMILIA
El 17 y 18 de septiembre del 2014, grupos de estudiantes salieron a protestar por la posible alza de pasajes de transporte urbano o en contra del gobierno y las manifestaciones tuvieron brotes de violencia, causaron daños a la propiedad privada, manifestantes y miembros de la fuerza del orden heridos y estudiantes secundarios detenidos……
Y las declaraciones consabidas:
- “Como estudiantes secundarios del Ecuador rechazamos las políticas emprendidas por el gobierno con medidas represivas contra el movimiento estudiantil, no van a callar nuestra voz”
- Y el Ejecutivo que las califica como un intento “desestabilizador” y una forma de presión para “imponer” una agenda política.
Hasta aquí nada nuevo bajo el sol, solo parece una película repetida tantas y tantas veces, porque no es la primera ni será la última vez que sucedan las manifestaciones de los estudiantes.
Lo que sí llama la atención son las reacciones de los “Padres de Familia”, que inmediatamente han “PEDIDO PERDÓN” al gobierno por el comportamiento de sus hijos y en algún caso han implorado de rodillas su libertad.
No desconozco el derecho de los padres de familia a defender a sus hijos, pero NO estoy de acuerdo con la manera de hacerlo.
Porque el perdón es solicitar indulgencia de un castigo MERECIDO. Los padres están aceptando que sus hijos están equivocados, que su actitud es errada y que su opinión NO importa.
Un padre de familia dijo: “Ahora hay que disculparse así esté en la razón. Por un hijo, ¿qué tiene que hacer? El pueblo tiene que humillarse, por nuestros hijos nos estamos humillando”.
Pero la humillación se considera a toda acción que denigre a la dignidad humana.
Los padres de familia no pueden actuar fuera del marco legal, tampoco pueden ni deben responder por los actos de sus hijos, ellos ya están en edad de sufragar y asumir una posición política, es un deber ciudadano, así dice la ley y también regula las reglas del juego, si se equivocan existen los mecanismos legales para solucionarlo.
La práctica del arrepentimiento y el perdón la ha usado el catolicismo desde hace dos mil años, la han utilizado los mandatarios al disculparse por los errores cometidos en su gestión, la selección de futbol por haber hecho un mal mundial, el delantero por fallar un gol, entre tantos y cada uno para borrar todos los “pecados” y pedir otra y otra y otra oportunidad.
Los ciudadanos jóvenes o viejos debemos jugar limpio en democracia, exigir los derechos, pero sobre todo cumplir con nuestras obligaciones ciudadanas, así se puede construir un país racional, responsable y creíble.
Además si me gustaría saber que piensa y siente el Primer Mandatario que también ha pedido perdón y ha perdonado, al mirar como algunos de sus “mandantes” se humillan, lloran y se arrodillan para evitar que sus hijos asuman las consecuencias de sus propios actos .
Jorge Mora Varela
