ACEPTO LA LIBERTAD
Acepto la libertad,
impronta ineludible de mi ser humano,
ama silenciosa del acto de mirar,
libertadora del pensamiento,
aliada secreta de asombro.
Llave maestra para otear sin temores,
entre los rastros del evangelio de Jesús y,
los tortuosos senderos del anticristo de Nietzsche o,
entre la vía de la conciliación del Vaticano y,
los senderos latinoamericanos del Che Guevara.