A PEDRO CASTILLO LE FALTÓ CALLE, LE FALTÓ BARRIO, LE FALTÓ CANCHA
Resultó llamativo, mirar al presidente peruano Pedro Castillo como le temblaban las hojas mientras leía el documento dónde le comunicaba a la ciudadanía del Perú, que había resuelto disolver el Congreso y les manifestaba que convocaría a elecciones para elaborar una Nueva Constitución en un plazo no mayor a nueve meses y que mientras tanto se gobernaría con decretos ley.
Su intentona golpista le duró algo menos de dos horas y fue cesado por el congreso peruano, pero:
¿Cómo pudo el presidente peruano plantear su estrategia política si NO tenía músculo, ni político, ni militar, ni social?
Parecería una ingenuidad, pero creo que a Pedro Castillo le faltó calle, le faltó barrio, le faltó cancha.
O es que no conoce la historia reciente de sus amigos venezolanos, ecuatorianos, argentinos, cubanos.
Dónde los líderes políticos que quisieron implementar un “volantazo” político en sus países, se aseguraron de tener MÚSCULO, político, militar y social.
En nuestro vecindario el presidente que gobernó 10 años se preocupó de realizar las purgas necesarias hasta tener en la cabeza de las Fuerzas Armadas y en la Policía a personas confiables y afines a su modelo político.
Con un lobbying político intenso, estratégico, inteligente, con recursos financieros suficientes, que le facultó tener atadas las alianzas necesarias en la arena política de manera que le aseguró los votos que garantizaron las mayorías suficientes para imponer o las minorías suficientes para detener.
Además de una política comunicativa amplia, invasiva e insistente, para tener una población cautiva a su discurso sistemático, intencionado e ideológico, que le permita ir construyendo un modelo de pensamiento en la población para ganar e imponer “la batalla cultural”, por eso la importancia de controlar los medios de comunicación masivos y con alcance nacional.
Esas estrategias que a su manera las desarrollaron en su momento los cubanos, venezolanos, argentinos o los mismos españoles, para referirme a los países de habla hispana.
A Pedro Castillo le faltó calle, le faltó barrio, le faltó cancha, o preocupación por la historia reciente de algunos de sus países amigos y/o la capacidad suficiente para entender los signos de los tiempos expresados en hechos que son resultado de una intencionalidad y que generan ciertos resultados políticos esperados; y eso que es “profesor” rural de primaria.
A Castillo y sus amigos les faltó tener en su celular la serie animada del “Príncipe de Macchiavello” en versión simplificada para Dummies, además de calle, cancha o barrio.
Jorge Mora Varela
Imagen tomada de: https://imagenes.20minutos.es/files/image_990_v3/uploads/imagenes/2022/12/08/63911e9b2e7b7.png
