Las batallas culturales
Cuentan que el escritor y filósofo español Miguel de Unamuno (1864-1936) cada vez que entraba al café dónde frecuentaba todas las tardes en la ciudad española de Salamanca decía:
“Buenas tardes, no sé de lo que están hablando, pero me opongo rotundamente”.
¿QUIÉNES GANAN LAS ELECCIONES?
Las gana el pensamiento imperante.
En la historia del Ecuador desde 1979 con la vuelta de la democracia han vencido las elecciones y alcanzado el poder: el rechazo (a las dictaduras, al velasquismo, a los obedientes del FMI), el miedo (al comunismo, al socialismo del siglo XXI, a la pérdida de la propiedad privada), el cansancio (de los grupos de poder dominantes y tradicionales), la revancha (de los que se han sentido atacados o vencidos), el temor (a los indios, a la vuelta de Correa, al neoliberalismo), la esperanza (de un salvador, de un mesías, de un iluminado, de un ser todopoderoso).
Entonces se han manejado frases para alimentar la hegemonía en el pensamiento colectivo, “En nombre de dios”, “prohibido olvidar”, “nunca más”, entre tantas.
De hecho, el poder ha llegado a las manos de quienes han sabido construir el pensamiento hegemónico. La masa mayoritaria, quienes alimentados de una idea fuerza ha puesto a los gobernantes
El filósofo, teórico marxista, político, sociólogo italiano Antonio Gramsci (1891 – 1937), uno de los teóricos del marxismo y destacado por sus aportes teóricos en conceptos como hegemonía cultural, es clave en el pensamiento de las izquierdas y el socialismo del siglo XXI para conquistar el poder a través de la construcción del pensamiento hegemónico sobre todo enquistado en las universidades sobre todo de Hispanoamérica.